Cuando inicio la Guerra fría, todo el mundo estaba a la expectativa de lo que podía suceder. Si bien ya se había desarrollado la televisión como medio informativo, las emisoras de radio seguían siendo la mejor forma de estar informado. Pero las ondas radiales no solo eran usadas para las noticias, sino como medio de comunicación para el espionaje. De ello queda una misteriosa estación de radio soviética que sigue transmitiendo y nadie sabe con precisión quién la controla.
Como es bien sabido, no era una guerra física, sino una latente confrontación política e idealista entre la Unión Soviética y los Estados Unidos. Durante este tiempo se desarrolló mucho el espionaje para conocer los planes y movimientos militares los unos de los otros. Por la tensión que existía, tuvieron que buscar diferentes canales de comunicación, y es aquí donde las emisoras de radio clandestinas tuvieron un papel importante.
36 años, 24 horas del día

Existe aún una estación de radio soviética, la “MDZhB” que sigue transmitiendo. Se cree que está ubicada cerca de San Petersburgo, en una zona pantanosa. Y ha estado funcionando durante los últimos 36 años, las 24 horas del día, transmitiendo tan solo un zumbido monótono.
Esta misteriosa radio utiliza una frecuencia relativamente baja, conocida como “onda corta”. Se ha llegado a catalogar como una antigua y clandestina “emisora de números”, hay quienes creen que era empleada para transmitir mensajes codificados a espías de Rusia en la guerra fría.
Puede escucharse desde cualquier lugar del mundo, solo hay que sintonizar una radio en la frecuencia 4625 kHz. Esta radio tiene decenas de miles de seguidores que afectuosamente la conocen como The Buzzer (“El Zumbador”). Pero nadie sabe lo que está escuchando en realidad.
Nadie sabe con exactitud quien la ópera, pero en ocasiones un hombre o una mujer leen algunas palabras en ruso, frases como “bote inflable” o “especialista en agricultura”. Otra curiosidad de esta transmisión es que se puede escuchar también un segundo sonido. Como si fuese un fantasmal barco haciendo sonar su sirena de niebla.
Se calcula que comenzó a transmitir por primera vez hacia el final de la Guerra Fría. Y en vez de desaparecer luego del colapso de la Unión Soviética, la actividad de la estación aumentó.
Voces

A pesar de su zumbido constante, la estación de radio soviética ha transmitido en diversas ocasiones mensajes enigmáticos. A veces, se han escuchado conversaciones lejanas y otros ruidos desde atrás del micrófono. Esto ha creado la teoría que afirma que el zumbido no se genera internamente, sino que se transmite mediante un dispositivo colocado detrás del micrófono en directo.
Existen casos de mensajes puntuales como el del 3 de noviembre de 2001, cuando se escuchó una conversación en ruso entre dos personas: Un hombre que decía “Soy el 143, no recibo el oscilador” y una mujer alegando que “Eso viene de la sala de operaciones”. Curiosamente, esas mismas voces volvieron a aparecer realizando una cuenta del 1 al 10 en varias ocasiones.
Por otro lado, el 2 de septiembre de 2010 se pudo escuchar varias veces un fragmento del Lago de los cisnes de Chaikovski. Mientras que cuando la emisora cambió de nombre y pasó de llamarse UVB-76 a MDZhB (Mijail Dimitri Zhenia Boris) se escuchó este mensaje “0-4-9-7-9 D-R-E-N-D-O-U-T 19-76-28-09 T-E-R-E-N-S-K-I” y continuaron los zumbidos.
¿Para qué y quién usa la estación de radio soviética?

Es la pregunta que todos se han hecho. Hay quienes proponen que es utilizada como señal por si Rusia es blanco de un ataque nuclear. Otros afirman que sigue usándose como canal de información para los espías rusos.
Por otro lado, según la Revista de las ciencias de la Tierra Rusa, el observatorio geofísico de Borok realiza una investigación titulada “Sondeo de la ionosfera mediante el efecto Doppler de las ondas de radio”. Para ello tiene la frecuencia 4625 MHz asignada, la misma frecuencia de emisión que la UVB-76.
El propósito real de que la misteriosa estación de radio soviética siga transmitiendo es incierto aún. Sin embargo, esperamos que a su llegado momento alguien revele su secreto.
Imagen: Pxhere