Si bien ha pasado el tiempo, aún nos quitamos el mal sabor de boca que nos dejó la versión de Netflix de Death Note. No solo por ser radicalmente distinta a la historia de Tsugumi Ōba, sino porque tanto el desarrollo de la historia como los propios personajes no terminaron de convencer. Por eso hoy queremos volver un poquito al pasado y hablar de la gloriosa versión, anime del año 2006. Hoy les traemos 12 razones de por qué deberías verla.
1) Un protagonista que mueve la historia
Light Yagami tiene muy buen puesto el título de protagonista. No solo es carismático y encantador, sino que también tiene la motivación y la voluntad para hacer que la historia avance. No es que a él le pasen cosas, sino que él hace que pasen las cosas. Es cierto que la libreta le es concedida, pero su actitud, comparada con su versión de Netflix, es mucho mejor. Solo basta con ver su reacción al conocer a Ryuk.
2) Los primeros capítulos son intensos
Los primeros capítulos siempre son importantísimos para la trama. Si no son buenos, simplemente no seguimos viendo. Es necesario presentar información y, al mismo tiempo, generar expectativa por lo que va a ocurrir. Death Note hace eso magistralmente, pues nos muestran a un Light Yagami aburrido de lo podrido del mundo, siendo el brillante estudiante que es y a un Ryuk dispuesto a hacer lo que sea para divertirse un rato. Cuando Light se hace con la libreta, es interesante verlo experimentar y aprender cómo funciona. Pero lo mejor, estarán de acuerdo conmigo, fue la primera aparición de L en el capítulo 2. Lo que nos demuestra que las cosas no serán tan fáciles para el protagonista.
Y hablando de L…
3) Un antagonista a la altura
Los rivales a veces son más queridos que el mismo protagonista. Pero L lleva esto a otro nivel. Su carisma e inteligencia lo ha llevado a convertirse en uno de los personajes más conocidos y apreciados en la historia, no solo del anime, sino de la ficción. Siempre es impresionante y divertido escucharlo, explicar sus deducciones mientras come dulces de las maneras más creativas.
4) Un mensaje profundo
Es divertido ver esas series del tipo “apaga tu cerebro y disfruta”, pero si es lo que buscas, me temo que Death Note no es tu mejor opción. No solo es necesaria mucha atención para entender las estrategias que utilizan los personajes para atraparse mutuamente, sino que la propia historia esconde una profunda reflexión acerca de qué es el bien, qué es el mal, la naturaleza humana, la justicia y los métodos válidos para alcanzarla.
5) Pocos capítulos
Muchos, cuando éramos jóvenes, veíamos animes de extensa duración que nos acompañaron mientras crecíamos, como Dragon Ball o Naruto. Pero ya no somos esos niños de 8 años que podían pasar toda la tarde viendo cómo le parten su mandarina en gajos a Gokú antes de descubrir cómo derrotar al villano de turno. Si estás con poco tiempo y quieres una buena historia que ver de principio a fin, Death Note te la ofrece en 37 capítulos. Directo al grano, sin rellano y siempre emocionante.
6) Los shinigamis
Creo que nadie aquí va a cuestionar que la actuación de Willem Dafoe como Ryuk fue lo mejor de la adaptación de Netflix. Pero los shinigamis en el anime también tienen lo suyo. Es imposible no reír con las ocurrencias de Ryuk en los momentos que deberían ser serios. Incluso uno de ellos, Rem, tiene algo de desarrollo como personaje. Además, la adaptación de la obra de Oba nos da algunos vistazos del mundo shinigami. Son divertidos, carismáticos, ocurrentes y, sin duda alguna, se roban el show.
7) La banda sonora
La música puede hacer de una buena serie una serie espectacular. Y eso es lo que pasa con Death Note. No hay mucho que decir en este punto, salvo el agradable hecho de que cada personaje tiene su propio tema. Lo que funciona como un complemento agradable para quien leyó el manga y que quiere volver a experimentar lo mismo que sintió con la versión impresa, pero con más intensidad.
8) No subestima al espectador
Es cierto que Death Note no es exactamente la obra más compleja del mundo, pero le debemos reconocer el hecho de que no subestima al espectador. Se atreve con una trama inteligente y llena de misterio, sin llegar a explicarnos con peras y manzanas qué es lo que está ocurriendo ni lo que ocurrirá. Si quieres empezar a crear teorías sobre las series y ocupar toda tu fuerza intelectual para tratar de adivinar qué es lo va a pasar, Death Note es una buena forma de empezar.
9) La relación entre Light y L
Una buena historia siempre necesita de una buena rivalidad. Y eso es lo que tenemos en este caso. La relación entre Light y L es de lo mejor que nos puede ofrecer esta serie. Sus conversaciones, sus sospechas mutuas, sus frases con más de un significado e incluso su mero intercambio de miradas encierra una colosal batalla intelectual de la que solo ellos son conscientes. Una lucha que se disfraza de amistad es un condimento muy saludable y entretenido. Y solo nos deja con ganas de más.
10) No todo se trata solo de los protagonistas
Ya hablamos mucho de Light y de L, pero si ellos son buenos es porque se enmarcan dentro de un mundo lleno de otros personajes interesantes. Cada personaje dentro de esta historia tiene un lugar de ella, y deja de tenerlo si es que es necesario. Misa Amane es la aliada de Light y un verdadero problema para la policía, el jefe Yagami es el oficial incorruptible que quiere atrapar a Kira sin saber que es su hijo, la hermana y madre de Light funcionan como contrapeso y nos muestran cómo el mundo sigue su curso fuera de la investigación policíaca. Por Dios, que incluso Matsuda, tan controvertido para el fandom, tiene sus momentos de gloria.
11) Lo puedes disfrutar sin ser audiencia frecuente de anime
Entendemos que entrar al mundo anime puede ser poco atractivo para muchas personas. Hay quienes han declarado que les parece que todos los animes se parecen o que cuentan siempre las mismas historias. Sin entrar a rebatir o confirmar esas ideas, sí podemos decir que no es necesario ser un gran conocedor del anime ni un erudito en la cultura japonesa para disfrutarlo. De hecho, si eres amante de series como Supernatural o 24 la puedes disfrutar sin problema. Tampoco es que sea una puerta de entrada al mundo de estas series en 2D, pues puedes verla y seguir con tu vida (aunque es probable que te pierdas de algunas joyitas por ahí).
12) No es la versión de Netflix
Sí. Hay que hablar del elefante en la habitación. Esta versión es infinitamente superior a su contraparte en acción viva. Puedes entrar a esta historia sin tener que enfrentarte a un Light llorón, una “Misa” manipuladora, las muertes tipo Destino Final, un L que se saca deducciones de la maga, etc.
PD: tal vez se pregunten por qué no he dicho nada sobre los sucesos más allá de cierto acontecimiento. Pues bien, eso sería spoiler.
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